El proyecto de Aprendizaje-Servicio “¿Barremos o nun barremos?” es una propuesta interdepartamental para las asignaturas de Lengua Asturiana y Literatura e Inglés. El proyecto tiene un doble objetivo: promover la recuperación y promoción de les mazcaraes d’iviernu y dar voz al alumnado, haciéndoles agentes culturales y fomentando la participación en su entorno próximo.
Alumnado del proyecto antes de su desfile por Arriondas
¿En qué consiste el proyecto que vais a presentar en la Feria?
El proyecto de Aprendizaje-Servicio “¿Barremos o nun barremos?” es una propuesta interdepartamental para las asignaturas de Lengua Asturiana y Literatura e Inglés. El proyecto tiene un doble objetivo: promover la recuperación y promoción de les mazcaraes d’iviernu y dar voz al alumnado, haciéndoles agentes culturales y fomentando la participación en su entorno próximo.
La idea surge de un análisis social también doble. Por un lado, se descubrió que la inmensa mayoría del alumnado desconocía la existencia de estas celebraciones asturianas. Nos encontramos ante una sociedad cada vez más globalizada e impersonal, por lo que resulta necesario profundizar en nuestras tradiciones, que muchas veces acaban olvidándose y despareciendo, para así entender nuestros orígenes. Por otro lado, nos enfrentábamos a un alumnado un tanto falto de oportunidades para tomar la iniciativa y participar en actividades del centro. Por lo tanto, decidimos asumir el reto de tratar la cuestión de les mazcaraes d’iviernu con el alumnado de Secundaria y Bachillerato, quienes serían los encargados de preservar estas costumbres en el futuro a la vez que ganaban confianza en sí mismos al asumir un rol principal en el proyecto.
El problema al que se pretende hacer frente con “¿Barremos o nun barremos?” es el del avance imparable de la globalización, sin olvidarse de la complejidad de llevar a cabo una propuesta que aglutine a casi 50 alumnos de procedencias dispares y con contextos socioculturales muy variados.
¿Cómo lo habéis llevado a cabo?
El proyecto comenzó durante el curso 2023/2024. A lo largo de estos dos años, se han seguido distintos pasos y siempre se ha buscado que el proyecto creciera y que el alumnado participante ampliase sus horizontes. De hecho, el cambio de curso ha venido respaldado por nuestra participación en los Premios Aprendizaje-Servicio, en los que resultamos finalistas a nivel nacional, suponiendo un impulso sin parangón para nuestra propuesta.
Allá por el curso pasado nos planteábamos una serie de preguntas importantes: ¿Qué podemos hacer para conservar las tradiciones asturianas? ¿Existen celebraciones de este tipo en otros países? ¿Cómo podemos contribuir a su difusión? ¿De qué manera puede el alumnado participar en su transmisión?
Todos estos interrogantes precisaban de una respuesta y, para ello, se comenzó con una etapa centrada en la investigación y estudio de fuentes documentales sobre estas tradiciones. El alumnado se acercó poco a poco a estas celebraciones para comenzar a comprender sus características.
El siguiente paso fue la realización de trabajos, de un carácter más tradicional metodológicamente hablando, elaborados por el alumnado sobre las características y los personajes, resultando en una exposición en el centro. Hasta ahí poco de innovador hubiera tenido este proyecto. Sin embargo, se necesitaba llegar al resto de la comunidad educativa, por lo que el alumnado decidió que sería buena idea desarrollar una mascarada en el centro. Para ello, se dio paso a la fase más creativa, con la elaboración de manera artesanal de los distintos disfraces que llevaría cada uno de ellos. Se realizó un desfile por el centro y se pidió el aguinaldo, imitando una mascarada real.
¿Habéis establecido algún tipo de colaboración con personas expertas, empresas o instituciones externas al centro?
El gran salto del proyecto llegó tras la concesión del premio, que motivó al alumnado a que el proyecto creciera de manera exponencial, saliendo del centro. Por un lado, se ha convertido en una iniciativa intergeneracional, en la que el alumnado impulsor ha visitado el Centro Polivalente de Recursos para Personas Mayores de Arriondas, con el fin de ofrecer a los usuarios una muestra de sus trabajos, de sus disfraces para los personajes asturianos e incluso de simular un viaje a las Islas Británicas para acercarles a las celebraciones inglesas e irlandesas y disfrutar de una adaptación de los “Mummers’ Plays”. Igualmente, participaron en un coloquio con los mayores de la residencia para aprender cómo se festejaba el Antroxu en el Oriente de Asturias en la primera mitad del siglo pasado; cómo se “mazcaritaban”; qué aguinaldos se cantaban; qué dulces se comían o qué travesuras se podían realizar.
Foto de familia del coloquio con los usuarios del CPR de Arriondas y con miembros de la asociación “El Cencerru” (Sidros y Comedies de Valdesoto).
Por otro lado, “¿Barremos o nun barremos?” sigue en su camino a favor de la inclusión, no sólo con la promoción de la participación de todo el alumnado, independientemente de su procedencia y características, sino que se ha invitado a los usuarios del Centro de Apoyo a la Integración de Arriondas (FASAD) a unirse al proyecto. Esta fase más solidaria consistió en una estrecha colaboración a raíz de un encuentro en el que el alumnado impulsor explicó las características del proyecto y animaron a los usuarios a colaborar con el diseño de una gran pancarta. Esta colaboración se culminó con una invitación a una representación en la Casa de Cultura, compartiendo escenario todos juntos. Del mismo modo, se animó al alumnado de 5º y 6º de Educación Primaria del CP Río Sella que cursan la optativa de Llingua Asturiana a participar en la representación, para acercarles a estas tradiciones asturianas.
El proyecto también cuenta con el respaldo de asociaciones culturales como “El Cencerru” (Sidros y Comedies de Valdesoto); Aguilandeiros de San Xuan de Villapañada (Grau); Fundación Belenos y el Archivo de la Tradición Oral de Ambás (ATOAM) que, desinteresadamente, han ofrecido formación y asesoramiento al alumnado del IES El Sueve para que su trabajo de campo fuera acertado y riguroso. Recientemente, hemos recibido el apoyo financiero de Caja Rural de Asturias, lo que permitirá ampliar los horizontes y dotar al alumnado impulsor de dos experiencias enriquecedoras por medio de visitas culturales.
Igualmente, y con el propósito de dar al proyecto un carácter holístico, este curso se está participando en la iniciativa “Proyecto EuropArte” que proponen los Amigos del Museo de Bellas Artes de Asturias. Para ello, el alumnado se ha acercado a las famosas carnavaladas de Evaristo Valle y las ha comparado con el trabajo del pintor londinense contemporáneo Ben Edge, dedicado al folklore británico. Igualmente, los alumnos han investigado sobre otras mascaradas de la Península Ibérica y del resto de Europa, ampliando sus conocimientos. Esta actividad es particularmente interesante porque parte del alumnado del proyecto no es originario de Asturias y nos ha permitido acercarnos a unas tradiciones que se extienden por todo el continente europeo, apreciar nuestros lazos comunes y potenciar, más si cabe, la integración de estos alumnos en la vida del centro y su entorno.
¿Qué habéis descubierto o logrado con el proyecto?
Los logros alcanzados con “¿Barremos o nun barremos?” son muy gratificantes y palpables. Si bien comenzábamos el proyecto con el alumnado apenas acostumbrado a trabajar en equipo y a desarrollar proyectos innovadores, ver su enorme evolución y crecimiento son indicativos de que el camino es el correcto. El proyecto se ha culminado de manera satisfactoria, con todos los alumnos participantes volcados en el proyecto, con el apoyo de las familias y con el visto bueno de la comunidad local parraguesa. Sin duda, haber dotado al alumnado de las herramientas correctas para que asuman un papel protagonista es uno de los principales aspectos que permiten su motivación, junto con la ilusión por la novedad y la innovación en el día a día. Por otro lado, todos ellos han superado sus miedos y se han enfrentado a sus dificultades, atreviéndose a hablar en público, a colaborar con compañeros que antes no conocían tanto y, tal vez el detalle más entrañable de todos, es que se ha producido una convivencia entre los alumnos de ambas asignaturas, sin fisuras, y creando un vínculo muy fuerte.
En lo que respecta a la temática del proyecto, el alumnado ha descubierto que la cantidad de mascaradas de invierno existentes en el continente europeo es infinita. Han aprendido sobre sus características, sobre sus similitudes y diferencias, y sobre su importancia y trascendencia en la cultura europea, como muestras ancestrales de rituales que marcaban el paso del invierno, frío y oscuro, al calor y la luz de la primavera.
En cuanto a los aprendizajes para el alumnado, el impacto ha sido muy positivo. Si ya se había notado un cambio el curso pasado, durante este curso el avance ha sido increíble. Han aprendido a colaborar, a compartir y a convivir en un entorno seguro, fomentando el respeto y la tolerancia. Además, han comprobado que las asignaturas no son compartimentos estancos, que el aprendizaje es transversal, y que pueden colaborar y compartir con compañeros que cursan otras materias, porque así lo facilita el enfoque de este proyecto. El aprendizaje-servicio ha aportado grandes beneficios al alumnado. Además, el proyecto goza de muy buena acogida entre el alumnado, las familias y la comunidad local de Parres.
¿Por qué es importante este proyecto y cómo lo estáis dando a conocer?
“¿Barremos o nun barremos?” es un proyecto importante porque aporta una solución real al problema de la unificación cultural que acarrea la globalización. En nuestro caso, permitimos que la sociedad aprenda, o recuerde, que existen las mascaradas de invierno y su trascendencia gracias al trabajo de unos jóvenes en quienes recaerá la responsabilidad de preservar estas tradiciones.
Los beneficios que aporta este proyecto recaen en distintos sectores. En primer lugar, nuestros alumnos se ven enriquecidos por los aprendizajes que adquieren de testigos de primera mano de las mascaradas de invierno (los usuarios del CPR de Arriondas). En otras palabras, la transmisión entre generaciones se ha logrado. En segundo lugar, los alumnos adquieren una actitud solidaria y empática al colaborar con los usuarios del CAI, permitiéndoles adaptar sus aportaciones a todo tipo de público. En tercer lugar, se encargan de ser ellos mismos transmisores a los escolares del colegio, continuando con la cadena de la transmisión cultural. En otras palabras, se ha creado una sinergia con la que han salido ganando todos: con el pretexto de preservar costumbres ancestrales, se han beneficiado un gran número de personas, superando las expectativas iniciales del proyecto con creces.
Representantes del proyecto “¿Barremos o nun barremos?” durante el Encuentro Estatal de Aprendizaje-Servicio celebrado en Mérida.
Los resultados del proyecto se han divulgado de distintas maneras. Inicialmente, se recogió en la prensa local (El Fielato) una noticia sobre la actividad celebrada en el IES El Sueve. Uno de los grandes impulsos ha sido la concesión del título de finalistas en los Premios Aprendizaje-Servicio, que se recogió en Mérida en diciembre de 2024. Por ello, el proyecto ya goza de un impacto nacional, del que se hicieron eco la prensa regional (La Nueva España) y local (El Fielato). Igualmente, en el portal web de la Consejería de Educación también se puede consultar una entrada sobre este proyecto. A pesar de ello, el espíritu emprendedor del alumnado participante no les ha permitido conformarse con ello y han querido ampliar la difusión durante el presente curso. El encuentro con los usuarios de la residencia de ancianos apareció en los informativos de la televisión regional (TPA) y el coloquio posterior apareció en el programa “Conexión Asturias”. Asimismo, esa jornada contó con la cobertura de la prensa regional (La Nueva España) y con una entrada en las redes sociales del Cronista Oficial de Parres, Francisco José Rozada Martínez. La jornada más solidaria también contó con presencia en la prensa regional, apareciendo incluso en la portada del diario La Nueva España.
La parte más emocionante para el alumnado es la colaboración con Caja Rural de Asturias y la grabación de un vídeo sobre este proyecto que aparecerá en el Canal Prestosu de YouTube de la entidad financiera que verá la luz próximamente. Está pendiente la publicación de una reseña sobre el proyecto en la página web de la Red Española de Aprendizaje-Servicio.
El proyecto también está integrado por una exposición que se puede visitar en la Casa de Cultura de Arriondas. La exposición está conformada por los trabajos del alumnado: mapas de Asturias y las Islas Británicas con sus festivales; personajes de todas las celebraciones y sus características; lapbooks sobre distintos aspectos; calendarios y líneas temporales; disfraces a escala real y una breve selección bibliográfica. La exposición es inclusiva puesto que cuenta con audioguías elaboradas por el alumnado en asturiano, castellano e inglés. Se puede acceder a las mismas escaneando un código QR.
¿Qué ha sido lo más difícil y qué os gustaría mejorar de cara a futuro? (Destaca sus puntos fuertes, como la creatividad o la innovación, y menciona posibles mejoras para el futuro.)
Los inicios no fueron sencillos, pues partimos desde cero en un concejo que no contaba con tradición de mascaradas de invierno, aunque sí de celebraciones del Antroxu. La búsqueda de información inicial fue complicada y más aún encontrar celebraciones extranjeras que compartieran características para que pudieran trabajarse con el alumnado de un modo adecuado. Además, los integrantes del proyecto apenas tenían experiencia en este tipo de iniciativas interdepartamentales y no contaban con experiencia en la transmisión al exterior.
A pesar de todo, se supieron sobreponer a las dificultades y, a día de hoy, uno de los puntos fuertes del proyecto es el enorme compromiso del alumnado, su implicación y su autoexigencia. De hecho, ellos mismos proponen mejoras para el futuro, porque quieren ir más allá y continuar aprendiendo. Esto es, sin duda, indicativo de que el alumnado necesita una propuesta motivadora
que los anime a expandir sus horizontes, algo innovador que rompa con sus rutinas, y un aliciente para mejorar. Cada vez que se finaliza una etapa del proyecto, quieren saber cuál va a ser la siguiente y les gusta aportar ideas, por lo que, rara vez decae su entusiasmo con esta iniciativa.
Se dará continuidad al proyecto, vista su excelente acogida y progreso. Nos gustaría que el alumnado continuase ampliando su conocimiento sobre el tema y que pudieran seguir adquiriendo competencias básicas en su formación. Sería interesante, para ello, poder colaborar con otras asociaciones culturales o entidades especializadas en este tema para continuar con la transmisión a otros sectores de la sociedad y con el intercambio de saberes.
¿Qué esperáis de vuestra participación en la III Feria de la Ciencia y de la Innovación?
La feria se presenta como un escenario idóneo para que el alumnado difunda los resultados de su investigación. En este caso, se les pondrá a prueba para explicar a todos los visitantes lo que han logrado con su proyecto. Este encuentro de proyectos escolares será, a buen seguro, muy fructífero para los alumnos del IES El Sueve, que aprenderán de las propuestas que ofrezcan otros centros e incluso podrán intercambiar opiniones con alumnos de otros lugares de Asturias. Además, nuestra participación en la Feria supondrá un escaparate excelente para enseñar el progreso que han hecho los alumnos desde que se les concediera el título de finalistas de los Premios Aprendizaje-Servicio. Estamos seguros de que gracias a esta jornada aprenderemos de los demás, compartiremos ideas e, idealmente, encontraremos posibles colaboradores con nuestro proyecto.