Autoría: Iván Diego (Asturias4STEAM), Esperanza Rodríguez, Marta Rodríguez y Alicia De la Hera (Dpto. de Biología y Geología, IES La Corredoria).

En la entrada anterior Caterina Solé (UAB) nos hablaba del enorme potencial de la ciencia ciudadana para introducir al alumnado en la investigación científica. Hoy nos desplazamos a Oviedo para descubrir tres proyectos de ciencia ciudadana  que están ayudando a transformar la enseñanza y el aprendizaje de las ciencias  en el IES La Corredoria. Melanogaster-CTF, CUIDA del agua y el Camino hacia el Desarrollo Sostenible brindan oportunidades únicas para que el alumnado de este centro público se sumerja en el mundo de la ciencia participando en investigaciones lideradas por centros de investigación de reconocido prestigio.

Melanogaster-Catch The Fly: Entender el cambio climático a través de la investigación genética

El proyecto «Melanogaster Catch The Fly» tiene a las moscas de la fruta (Drosophila sp.) como protagonistas. El IES La Corredoria participa desde el año 2021 aportando muestras de moscas de la fruta de la región oceánica del sur de Europa para un estudio coordinado por el Instituto de Biología Evolutiva de Barcelona (CSIC-UPF) que analiza los cambios a nivel genético que los organismos experimentan en su adaptación a las condiciones crecientes de aridez derivadas del cambio climático actual. Bajo la coordinación de su profesora de Biología, Esperanza Rodríguez Yanes, los estudiantes han participado en diferentes fases del proceso que empieza con la recolección de muestras de tres especies de moscas de la fruta en las fincas del Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (SERIDA). Las trampas para atraer a las moscas y los aspiradores portables fueron construidos previamente en el centro por el alumnado de la materia Tecnología Creativa.

Extracción de ejemplares de mosca de la fruta de una de las trampas

De vuelta al centro toca hacer trabajo de laboratorio. Los individuos se clasifican en función de su especie, encontrándose, principalmente ejemplares de D. melanogaster, D. simulans, D. suzukii y D. subobscura. Tras separar los ejemplares por sexo, el alumnado introduce los machos en unos viales asegurando unas condiciones adecuadas de conservación para enviar las muestras al grupo de investigación de Biología Evolutiva y Funcional dirigido por la Dra. González (González·Lab) que se encarga de extraer el ADN y realizar los análisis genéticos.

Clasificación de especies de mosca de la fruta en el laboratorio del centro

Esperanza percibe que la implicación directa en un proyecto científico real ha despertado la curiosidad del alumnado y les ha permitido experimentar de primera mano cómo la investigación científica puede tener un impacto global. A su vez la conexión con entidades reconocidas en el ámbito científico, el Instituto de Biología Evolutiva de Barcelona (CSIC-UPF) y el Servicio Regional de Investigación y Desarrollo Agroalimentario (SERIDA) en este caso, les ha permitido formar parte de una red científica global, ampliando sus horizontes más allá del aula.

CUIDA del Agua: Guardianes del río Nora y la conservación del entorno

El proyecto de ciencia ciudadana»CUIDA del Agua» ha convertido a los estudiantes de 1ºESO y 1ºBachillerato en protectores apasionados del río Nora. Marta Rodríguez, profesora de Biología, es la coordinadora de este proyecto en el que están implicados también los departamentos de Física y Química y Matemáticas. El vínculo establecido con el Centro Universitario de Investigación y Desarrollo del Agua (CUIDA) de la Universidad de Oviedo, está suponiendo una experiencia muy enriquecedora en la que el alumnado participa activamente en la exploración y preservación del medio ambiente. El proyecto ha llevado a los estudiantes a convertirse en verdaderos científicos ciudadanos.

Recogida de muestras y análisis físico-químico de las aguas del río Nora .

El análisis fisico-químico de las aguas del río Nora y la recolección de muestras de ADN ambiental y microplásticos no solo han alimentado una base de datos de vital importancia para la Universidad de Oviedo, sino que también han despertado un mayor interés y compromiso por parte de los jóvenes hacia la conservación de los recursos hídricos y la biodiversidad animándoles a asumir un papel activo en la conservación de su entorno local.

Proyecto Camino hacia el Desarrollo Sostenible: Hacia una Educación Ambiental Integral

El tercer proyecto en liza está dirigido por Alicia de la Hera Sánchez y representa un compromiso con la sostenibilidad. Al analizar y evaluar el entorno de nuestro centro educativo, el alumnado de 1º ESO desarrollará propuestas y estrategias para mejorar la sostenibilidad ambiental. Este enfoque práctico no solo promueve una educación integral en temas ambientales, sino que también fomenta una cultura de responsabilidad y acción concreta para preservar nuestro entorno local.

Alumnado de 1º ESO entrevista a Carlota, personal de limpieza del centro, dentro del proyecto «Caminando hacia el desarrollo sostenible» .

Impacto educativo: Más allá del aula y mirando hacia el Futuro

La colaboración con entidades científicas de renombre no solo han brindado a los alumnos la oportunidad de involucrarse en proyectos de ciencia ciudadana, sino que también han fomentado un aprendizaje significativo. Además de adquirir conocimientos teóricos, el alumnado ha experimentado la emoción y los desafíos que plantea la investigación práctica mejorando sus habilidades técnicas (ej. estrategias de muestreo, manejo de instrumental y protocolos de actuación en laboratorio).  La interacción con entidades y profesionales del ámbito científico ha contribuido a desarrollar una comprensión más profunda de la naturaleza de la ciencia y su aplicación en la vida real.

Stand del proyecto Melanogaster CTF en la I Feria de la Ciencia e Innovación de Asturias (Noviembre 2022)

La oportunidad de presentar resultados en eventos como la I Feria de la Ciencia y la Innovación de Asturias o la próxima participación de alumnado del centro en el encuentro “Primavera de la Ciencia ciudadana” (Zaragoza, 12-13 de Abril) permiten ampliar el repertorio de prácticas científicas a la vez que abren nuevas oportunidades de colaboración con agentes externos y otros centros educativos que, sin lugar a dudas,  contribuirán a seguir sentando las bases para formar a una generación de ciudadanos y ciudadanas  interesadas e implicadas con la ciencia y la defensa del medio ambiente.